La hipoxia es una de las manifestaciones clínicas más frecuentes de enfermedades respiratorias y cardiacas, ¿Aún no sabes que es? En este apartado te enseñamos su significado y a cómo identificarla ¡Continúa leyendo! Hemos recopilado la mejor información para ti.
¿Qué es la Hipoxia?
El término hipoxia significa bajos niveles de oxígeno en la sangre, células y tejidos. Puede deberse a una gran variedad de causas, desde hábitos como el tabaquismo, hasta la incapacidad del cuerpo de adaptarse a ubicaciones con grandes alturas sobre el nivel del mar.
Grados de hipoxia
La hipoxia se clasifica comúnmente en cuatro grados en función de su gravedad:
- Leve: Es cuando la presión parcial de oxígeno en la sangre arterial es de 60-79 mmHg.
- Moderada: Cuando la presión parcial de oxígeno en la sangre arterial es de 40-59 mmHg.
- Grave: Cuando la presión parcial de oxígeno en la sangre arterial es entre 20-39 mmHg.
- Anoxia: Cuando la presión parcial de oxígeno en la sangre arterial es menor de 20 mmHg o cuando no hay oxígeno disponible.
Síntomas de la hipoxia
La hipoxia es una condición en la que el cuerpo no recibe suficiente oxígeno. El oxígeno es necesario para que las células del cuerpo funcionen correctamente y sin suficiente cantidad de este, las células pueden dañarse o morir. La hipoxia puede ser causada por varias razones, como enfermedades pulmonares, enfermedades cardíacas, exposición a altitudes elevadas o envenenamiento por monóxido de carbono.
Los síntomas de la hipoxia pueden variar dependiendo de la gravedad de la afección y pueden incluir:
- Dificultad para respirar.
- Mareo o confusión.
- Fatiga o debilidad.
- Dolor de cabeza.
- Cambios en la visión o audición.
- Náuseas o vómitos.
- Palpitaciones cardíacas.
- Cambios en la piel, como enrojecimiento o cianosis, que es una coloración azulada de la piel y membranas mucosas.
Causas de la hipoxia ¿Por qué se produce?
La falta de oxígeno puede cuantificarse por medio de un saturómetro de pulso, que es un pequeño dispositivo que va ubicado en el dedo y mide la concentración de oxígeno en sangre en segundos, la disminución de sus valores puede ser causada por:
- Afecciones pulmonares: Las enfermedades que afectan los pulmones, como la enfermedad pulmonar obstructiva crónica o EPOC, el asma, la fibrosis pulmonar y la neumonía, pueden reducir la capacidad de los pulmones para absorber oxígeno del aire.
- Afecciones cardíacas: Las enfermedades cardíacas, como la insuficiencia cardíaca, pueden reducir la cantidad de sangre que el corazón bombea al cuerpo, lo que disminuye la cantidad de oxígeno que llega a los tejidos.
- Envenenamiento por monóxido de carbono: El monóxido de carbono es un gas venenoso que se produce cuando los combustibles como el gas, el petróleo o la madera se queman sin suficiente aire. Este gas se adhiere a los glóbulos rojos de la sangre y evita que el oxígeno se transporte a los tejidos.
- Altitudes elevadas: En estas condiciones la cantidad de oxígeno en el aire es menor, lo que hace que sea más difícil para los pulmones absorber suficiente oxígeno para las necesidades del cuerpo.
- Anemia: Es una afección en la que el cuerpo tiene una cantidad insuficiente de glóbulos rojos o hemoglobina, lo que disminuye la cantidad de oxígeno que se puede transportar en la sangre, ya que la hemoglobina es quién transporta al oxígeno.
- Lesiones cerebrales: Estas pueden interferir con el suministro de oxígeno al cerebro, lo que puede causar daño cerebral y otros problemas.
La hipoxia puede ser peligrosa y puede causar daño severo en los órganos y en el cerebro si no se trata, por ello, si sospechas de hipoxia, acude de forma inmediata con tu médico tratante.
¿Qué enfermedades pueden causar hipoxia?
Dentro de las enfermedades más comunes que pueden causar hipoxia están:
- Enfermedad pulmonar obstructiva crónica o EPOC: Es una enfermedad pulmonar crónica que provoca una obstrucción en las vías respiratorias y dificulta la respiración.
- Neumonía: Es una infección pulmonar que causa inflamación y puede dificultar la respiración.
- Insuficiencia cardíaca: Una condición en la que el corazón no puede bombear suficiente sangre al cuerpo por daño de su anatomía.
- Enfermedades del corazón y de los vasos sanguíneos: Como la angina de pecho, el infarto agudo de miocardio o el accidente cerebrovascular.
- Anemia.
- Embolia pulmonar: Un bloqueo en las arterias pulmonares que puede dificultar el flujo sanguíneo y con ello, la llegada de oxígeno al resto del cuerpo.
Es importante señalar que esta no es una lista exhaustiva y que existen muchas otras enfermedades y condiciones médicas que pueden causar hipoxia. Sin embargo, estas son las más frecuentes.
¿Cuáles son los 4 tipos de hipoxia?
- Hipoxia hipóxica: Es la forma más común de hipoxia, y se produce cuando hay una falta de oxígeno en el aire, como en altitudes elevadas o en espacios cerrados sin suficiente ventilación.
- Hipoxia anémica: Ocurre cuando hay una cantidad insuficiente de glóbulos rojos en la sangre o cuando la hemoglobina, la proteína que transporta el oxígeno en la sangre, está disminuida. La anemia, la pérdida de sangre y la exposición al monóxido de carbono son causas comunes de hipoxia anémica.
- Hipoxia isquémica: Se produce cuando hay una falta de flujo sanguíneo, lo que impide que el oxígeno llegue a los tejidos. Esto puede ser causado por una variedad de factores, como un ataque cardíaco, un accidente cerebrovascular o una lesión en la médula espinal.
- Hipoxia histotóxica: Ocurre cuando hay suficiente oxígeno en el aire y en la sangre, pero el cuerpo no puede utilizarlo debido a una intoxicación por sustancias como el cianuro, que impide que las células utilicen el oxígeno de manera efectiva.
¿Qué es la hipoxia silenciosa?
La hipoxia silenciosa es una forma de hipoxia que puede ocurrir cuando se está en altitudes elevadas sin darse cuenta. A diferencia de otros tipos de hipoxia, la hipoxia silenciosa no siempre presenta síntomas evidentes, por lo que a menudo se conoce como silenciosa.
En altitudes elevadas, la cantidad de oxígeno en el aire es menor, lo que puede provocar una disminución en la cantidad de oxígeno que llega a los tejidos. Si la persona no está adecuadamente aclimatada a la altitud, puede ser más propensa a experimentar este tipo de hipoxia.
Puede ser peligrosa porque la persona puede no darse cuenta de que está experimentando hipoxia y no buscar tratamiento. Y si no se trata, puede causar daño severo en los tejidos. Por lo tanto, es importante estar atento a los síntomas de la hipoxia que te hemos mencionado anteriormente.
¿Qué hacer en caso de hipoxia?
Si sospechas que tú o alguien más está experimentando hipoxia, es importante buscar atención médica de inmediato, ya que es importante tratarla apenas se manifiesta. Mientras localizas a tu médico de confianza, hay algunas medidas que si puedes tomar para ayudar a aliviar los síntomas de la hipoxia y prevenir complicaciones:
- Asegúrate de estar respirando aire fresco y puro. Si estás en un área con aire contaminado, como un incendio, sal de la zona y busca aire limpio.
- Si estás en una altitud elevada, baja a una altitud más baja. Si eso no es posible, descansa y permite que tu cuerpo se aclimate a la altitud.
- Si estás en un ambiente de trabajo en el que puede haber una baja concentración de oxígeno, asegúrate de usar equipos de protección personal adecuados.
Si estás experimentando hipoxia debido a una enfermedad o a una condición médica, sigue las instrucciones de tu médico de confianza para tratar la causa subyacente.
Preguntas Frecuentes
¿Qué es la hipoxia neonatal?
La hipoxia neonatal es una falta de oxígeno en los tejidos de un recién nacido. Puede ocurrir durante el parto o poco después y puede provocar daño cerebral o incluso la muerte. El tratamiento consiste en proporcionar oxígeno y, en algunos casos, otras medidas médicas para reducir los efectos de la hipoxia.
¿Cuál es la diferencia entre hipoxia e hipoxemia?
La hipoxia se refiere a la falta de oxígeno en los tejidos del cuerpo, mientras que la hipoxemia es la disminución de la presión parcial de oxígeno en la sangre arterial.