Síntomas de Embarazo

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¿Estás embarazada y quieres saber cuáles son los síntomas y cómo van evolucionando a lo largo de la gestación?, o ¿Tienes un retraso y síntomas sospechosos, pero no estás segura de cómo identificar si se trata de una posible concepción?

¡Este artículo es para ti! Hemos recopilado toda la información que necesitas conocer sobre los síntomas que se presentan durante esta maravillosa etapa y te ayudamos a resolver todas tus dudas con respecto al tema.

¿Cuándo comienzan los síntomas del embarazo?

Aunque no lo creas, los síntomas del embarazo no tardan en manifestarse, algunas mujeres pueden percibir ciertos cambios físicos durante incluso las primeras dos semanas tras la concepción.

sintomas del embarazo

Una vez que se produce la fecundación, desde ese mismo momento el cuerpo de la mujer comienza a cambiar y prepararse para acoger a este nuevo ser en su vientre, sin embargo, no es sino hasta la segunda semana que se manifiesta el primer cambio, percibiéndose como la ausencia de menstruación.

Síntomas de embarazo en las primeras semanas

El resultado de los cambios hormonales que está sufriendo el cuerpo de una mujer gestante se manifiestan de diversas maneras conforme vaya evolucionando el embarazo.

Durante las primeras semanas, además de la clara ausencia de menstruación, puede observarse incluso antes de este, un ligero manchado que podría confundirse con la regla, ya que sucede aproximadamente a la misma fecha que se le espera y se le llama sangrado de implantación.

Este sangrado es escaso, más claro que el sangrado normal y de corta duración. Otros síntomas que pueden evidenciarse son:

  • Dolor en las mamas.
  • Aumento del tamaño de los senos.
  • Cambio de coloración y tamaño en las areolas.
  • Incremento de la sensibilidad en los pezones.

Primer trimestre

En el primer mes de embarazo es característico encontrar trastornos alimenticios, esto es, por el fuerte cambio hormonal que se presenta en el organismo. Se puede evidenciar en el primer trimestre de forma típica:

  • Náuseas.
  • Vómitos, con frecuencia matutinos.
  • Antojos o rechazo por ciertos alimentos.
  • Deseo de ingerir alimentos extraños o cosas que no sean alimentos, como por ejemplo, la tierra.
  • La vagina se torna un poco más amplia, tanto sus labios mayores como menores y con sus paredes internas más sensibles.
  • La vagina cambia ligeramente de color, tornándose más oscura de su color habitual.

Si te realizas un examen ginecológico, podrá observarse en el cuello uterino un cambio de su coloración normal rosada, a una violácea, porque el flujo sanguíneo de la zona aumenta considerablemente.

Segundo trimestre

Aquí, existen muchas variaciones sistémicas que quizá no puedan percibirse, pero hay cambios a nivel sanguíneo, en cuanto a sus componentes formes que pueden observarse en un examen de laboratorio, por lo cual no hay que alarmarse, sino que son cambios normales, como aumento de los leucocitos, disminución de los eritrocitos, hemoglobina y otros menos importantes, estos cambios son discretos pero visibles.

Otras manifestaciones más evidentes son:

  • Los pechos siguen creciendo.
  • Estrías alrededor de la piel del abdomen y senos.
  • Cambios de humor.
  • Vértigos y mareos.
  • Deseos muy frecuentes de orinar más de lo normal.
  • Dolores a nivel de las piernas.
  • Hinchazón en los tobillos y pies por retención de líquidos.
  • Puede existir un ligero sangrado o hinchazón en encías.

Tercer trimestre

En este punto, los síntomas que se presentaron en el trimestre anterior persisten y de manera más acentuada. También se le añaden:

  • Dolor lumbar por el tamaño que ha alcanzado la pancita.
  • Reflujo gastroesofágico por la presión ejercida de la barriga.
  • Estreñimiento.
  • Cansancio y fatiga.
  • Dificultad para dormir por múltiples razones: movimientos del bebé, necesidad repetida de orinar, calambres, dificultad para respirar.
  • Entumecimiento de las piernas por la presión sobre los nervios.
  • Pueden aparecer hemorroides por el mismo estreñimiento.
  • Es posible que los movimientos fetales disminuyan al último mes de embarazo, pero calma, esto es por el menor espacio que ahora dispone.
  • Contracciones uterinas leves, con escaso dolor, irregulares y de corta intensidad.

Al acercarse la fecha probable de parto, suceden otros cambios como lo son el aumento de las contracciones, con incremento en su intensidad y duración, se vuelven más dolorosas y estas sí provocan el descenso del feto, haciendo que el cuello se borre y posteriormente dilate, para así comenzar el trabajo de parto.

Síntomas de un embarazo ectópico

Un embarazo ectópico es aquel en el que el óvulo fecundado se implanta fuera de la cavidad uterina, la mayoría de ellos ocurren en las trompas de Falopio, pero también pueden ocurrir en otras partes como: ovarios, cérvix o incluso en la cavidad abdominal.

Es importante identificar los síntomas de un embarazo de este tipo, ya que a pesar de ser poco frecuentes, son realmente peligrosos, y si no se tratan a tiempo pueden causar complicaciones graves. Se puede sospechar de un embarazo ectópico cuando:

  • Existe dolor abdominal intenso.
  • Dolor a nivel pélvico en uno de los lados, derecho o izquierdo.
  • Mareo.
  • Sangrado vaginal.
  • Hay pruebas sanguíneas positivas para embarazo o pruebas de imagen que lo confirman.

Este tipo de embarazo no pueden llegar a término, ya que se desarrollan en un espacio que no está diseñada para abarcar a un bebé, por ello, si continúa el embarazo, crearía en algún punto una ruptura de la zona, generando un sangrado que puede ser tan grave que pone en peligro la vida de la madre. Es por esta razón que debe interrumpirse y extraer al embrión por medio de cirugía. Recuerda que si presentas alguno de estos síntomas debes acudir de forma inmediata con un médico de confianza.

Embarazo psicológico

Los embarazos psicológicos ocurren cuando una mujer cree firmemente que está embarazada sin realmente estarlo. Esto puede llegar a tal nivel que comienza a presentar síntomas propios de la gestación, e inclusive aumento del volumen abdominal. Sin embargo, cuando se realizan pruebas de imagen se puede observar el útero vacío, sin presencia alguna de un bebé.

Embarazo silencioso

Se le dice embarazo silencioso a aquel que cursa sin presentar ningún tipo de síntomas, tanto así que la mujer puede no presentar grandes cambios abdominales, si no algo leve que pasa desapercibido y suele atribuírsele a cambios en la dieta.

Existen algunos que pueden seguir presentando menstruaciones, aunque algo irregulares. La mujer, en estos casos, suele percatarse de que está embarazada cuando está en el trabajo de parto, a menos que ya haya sido algo planificado y se haya dado cuenta por medio de las pruebas típicas de embarazo.

Preguntas frecuentes

¿Qué se siente en el estómago cuando estás embarazada?

En los primeros meses, no se percibe ninguna sensación a nivel estomacal. A medida que pasan los meses, el aumento progresivo del útero comprime el estómago, lo que puede provocar reflujo gástrico, sensación de llenura e inclusive náuseas, aunque estas últimas se le atribuye más a los cambios hormonales y son más comunes al comienzo del embarazo.

¿Cómo es la orina de una mujer embarazada?

La orina de una embarazada suele ser mucho más diluida, debido a un aumento del flujo plasmático a nivel renal, que tiene como consecuencia un incremento en la filtración de orina, lo que se ve reflejado como necesidad de orinar repetidas veces y en grandes cantidades, percibiéndose mucho más diluida de lo que estaría si no estuviera embarazada.

Además de esto, a nivel molecular, suele haber un incremento de la glucosa en la orina, que es normal, así como también la presencia de hormona gonadotropina coriónica humana en su fracción beta, que es la que se detecta en las pruebas de embarazo.

Síntomas de embarazo en hombres

Aunque no lo creas, hay un síndrome que se denomina Couvade, el cual, aunque te parezca increíble, trata de una condición en la cual el hombre puede presentar de manera involuntaria todas las manifestaciones de un embarazo.

Se cree que tiene un origen psicológico, aunque hay otros estudios que atribuyen su origen a las hormonas de la madre, que al estar en íntima cercanía con el papá del bebé, es capaz de que estás puedan influir de cierta manera.

Artículos y Fuentes de información